La etapa de hoy ha sido algo extraña. Muchos amigos de otros clubes. Ritmo hasta Barranco Hondo bastante liviano, después, infernal para mí. Se ha formado por atrás una grupetta, que ha aguantado hasta “la meá der perro”, que siendo sincero, no me ha quedado claro, cual de la ristra de cuestas que he subido o mejor dicho sufrido, era la puñetera meá, por mucho empeño que ha puesto mi querido Juan Piedra, que creo, tiene un hijo ciclista, que el otro día coronó primero el Aspín, gracias a los genes que le legó al engendrarlo.
En la Meá, toque a retirada. Juan Piedra, Pulga, Peluqui, Pepe Jiménez se unen a los que ya abandonaron en Castilblanco, Juan Aguilar, Jordi, Alejandro Dominguez, María Pujol...Me quedo solo con el Checo, que hoy era su última etapa con nosotros, ya que se le acaba la beca y se marcha.
Llegamos a El Ronquillo bastante tocados, pero llegamos los dos, sanos y salvos.
De regreso desbandada general, algo así con una meadita de un perro, a chorreito. La vuelta , un desastre, se tenía que haber neutralizado, como se hizo el día de la etapa de El Ronquillo. Todavía no comprendo, porqué mis compañeros de grupetta se han vuelto, me han privado de su agradable compañía en el resto de la etapa y de la cervecita al acabarla. Que tomar me la he tomado, y bien acompañado por El Checo, Lorite, Benítez, Pedro el Copiloto de la furgo, y éste amigo cuyo nombre no recuerdo nunca, rizillos, rulillas, inestrillas... no me acuerdo, pero estaba y se lo agradezco...
Porqué no se acaban las etapas?, si te quedas del grupo te vas?, Yo disfruto mucho con la grupetta que se forma últimamente cuando las fuerzas flaquean, Mi Pepe jiménez, Mi Piedra, Mi J Antonio Molina, Mi J Maria García del Valle, Mi Pulga, todos son bienvenidos, no siempre lo importante es ir en cabeza, unos buenos colegas de grupetta son hoy día muy cotizados. Por favor, acabemos las etapas, y si son duras, se espera al que haga falta, no pasa nada, somos colegas de grupetta. Yo os ofrezco mi rueda, al igual que antes iba, al abrigo de las vuestras (recordáis, he cogido la frase de otra crónica). Es necesario fomentar otros valores y sumar al protagonismo de los que van en cabeza, el de los colegas de grupetta que por diversas razones quedan rezagados. Os voy a contar un pensamiento en voz alta: “uno es esclavo de sus palabras y dueño de sus silencios”. A lo largo de mi vida deportiva, me he encontrado con un fenómeno curioso, independientemente del deporte practicado. Todo el que era bueno en dicho deporte, contaba, por descontado, con el beneplácito de todos. Ahora, que practico ciclismo, la historia se repite, el patrón de medida del respeto, es lo mucho o poco que andes cada Domingo. Es cómo una Ley Universal, que no está escrita en ningún libro, pero que entre todos la mantenemos. El respeto hacia las personas debe de ser independiente de sus alardes deportivos. Quizás somos culpables, del ego que invade a insolentes adolescentes que por dar patadas a un balón se creen los amos del mundo.
Tiene cierta razón cuando se depende económicamente de la práctica deportiva, pero entre nosotros, ¿vive alguien de la bicicleta?, que yo sepa nadie. Al mantener esa Ley Universal, volvemos a las cavernas, donde prevalecía La Ley del más fuerte.
El Hombre decide, en un periodo de su historia, vivir en sociedad, para evitar precisamente que domine el Fuerte, creando leyes que amparan a los mas desfavorecidos y que iguala las oportunidades de todos.
Esas deben de ser las premisas de cualquier Club de aficionados que se precie, donde, además de los alardes deportivos de muchos de sus socios, también se encumbren valores como la Solidaridad, el Compañerismo y el Sentimiento de Colectividad. Yo estoy muy orgulloso de los logros deportivos de mis compañeros de Club, pero de igual manera o más de los colegas de grupetta, de la cervecita al acabar la jornada dominical, de los amigos que hago cada día, de las historias que surgen en cada jornada y que sirven para alimentar unas risas sanas y sinceras. Precisamente hoy, disfrutando durante la ruta de una conversación con mi amigo Juan Aguilar, recordamos a ese canario que se dejó ver por éstas tierras y que tan sabios consejos nos dejó. Un día unos colegas de ruta, recriminaban a Cesar, que ¿como estando él bien de forma, se había quedado con un rezagado?, él contestaba que no todo es andar en esto del ciclismo, que tan importante o más es ser solidario con los demás, y que por un día que no llegara con los primeros no le iba a pasar nada, y además había ganado un amigo y una interesante conversación que de otra manera se habría perdido.
Esa Ley Universal os la traduzco perfectamente: “Quién a fuego mata, a fuego muere” si alimentamos la Ley del más fuerte, el día de mañana, cuando las canas cubran nuestras cabezas, los lobos que habremos criado con ésta Ley, no serán Solidarios, ni Compañeros, ni Fieles Amigos de grupetta.
Tendremos que buscar el abrigo de otros viejos, cuando lo bonito sería disfrutar de las historias de nuestros Maduros de Club, porque en el Pedal no se envejece, se madura y fusionarlas con las de los delfines que vengan empujando fuerte, de los que estaremos orgullosos, porque habrán mamado de éste Club, además de Competitividad, Generosidad, Compromiso, Solidaridad.... y serán grandes deportistas con unos valores que enriquecerán sus vidas.
Hay quién cree que lo expuesto, es un signo de debilidad, y yo lo respeto. Pero ¿Quién es el más débil?. Un Abrazo Fuerte y Recordad que formamos parte del mejor Club del Mundo.
PD: Hoy ha sido una nota exenta del humor al que os tengo acostumbrados, pero cómo os digo ha sido una etapa extraña, pero el humor volverá en las próximas, os lo prometo.No entiendo porqué la participación en estas pruebas no son más numerosas, son preciosas, os animo, a los ausentes éste año a no faltar el próximo.
Crónica de SERGIO RIVERO 21/06/2011