En las fechas que nos encontramos naturalmente es obligado hablar del Tour y a ello vamos. Como en toda carrera ciclista se dice que hay una conjunción de dos factores fundamentales, intrínsecamente ligados, que son el recorrido y lo que los corredores quieran hacer en ese recorrido. Veamos, pues, en primer lugar qué me parece el recorrido. El recorrido del Tour 2011 es como todos los tours en los últimos 15-20 años, quizá un poco dulcificado para evitar en lo posible lo ”inevitable” y así todos nos entendemos. Los 10-12 primeros días son como de costumbre: 8 etapas llanas, 2 de media montaña y una crono por equipo. Las 6 primeras etapas en línea transcurren por el Noroeste de Francia y además del peligro intrínseco de estas etapas con codazos a tope (lo que los franceses llaman “se frotter”) están las condiciones meteorológicas que no suelen ser muy buenas en la 1ª semana de Julio. Por tanto, como decía Echevarri, en estas etapas no se gana el Tour pero es fácil perderlo. La primera etapa atraviesa el famoso Pasaje de Gois, tan cruel para Zülle en 1999, pero creo que este año es al principio de la etapa y no creo que tenga mayores consecuencias. La 2ª etapa es una crono por equipos, corta, de 23 Km que tampoco creo que establezca diferencias importantes, aunque es obvio que los equipos especialistas (HTM, Leopard, Sky) pueden arañar un minutito. Las dos etapas de media montaña (finales en Super-Besse y St-Flour) transcurren por el centro de Francia y en teoría son muy duras y propicias a escapadas de lo que los franceses llaman “barodeurs” (podría traducirse por osados o guerrilleros). Suele hacer mucho calor y el mayor peligro que le veo es que se meta en la escapada un outsider y luego cueste Dios y ayuda bajarlo del pedestal.
En los Pirineos se han diseñado 3 etapas de montaña, pero sólo 2 merecen tal calificativo ya que la que finaliza en Lourdes sólo tiene un col (¡aunque es el Aubisque por la cara oeste!), es corta (poco mas de 150 Km) y la cima está a más de 40 Km de meta; no creo que ningún favorito de mueva y lo suyo es una escapada que llegue a meta. Por el contrario la primera etapa pirenaica, con final en Luz Ardiden, me parece una preciosa etapa, con la inclusión de la Hourchette d’Ancizan que es el Aspin por la cara oeste. Yo conozco esta subida perfectamente y puedo deciros que es muy dura, bastante más que el Aspin por la cara sur, la de Arreau. La Hourchette se encadena con el Tourmalet cara este y final en alto, en Luz Ardiden. En mi opinión una preciosa etapa a la que no le falta ni le sobra nada. La tercera etapa, con final en Plateau de Beille, es otra digna etapa de los Pirineos, bastante dura, pero me gusta más la de Luz. En estas dos etapas se separará el trigo de la paja y no quedaran más de 4-5 corredores con posibilidades de ganar el Tour.
La etapa que finaliza en Montpelier puede tener más peligro que una gitana en el Carrefour. Son 200 Km y, si pega el mistral, el calor y los abanicos estarán a la orden del día. Se critica a Contador por llevar a Noval en su equipo pero yo creo que es un corredor ideal para este tipo de etapas ya que es fuerte en llano, sabe “se frotter” y es un armario que te tapa el aire como si fuera un camión. Tras una etapa de media montaña en Gap, que nunca dice nada, llegamos a Los Alpes. La primera etapa del tríptico alpino es para entrar en calor: Montgenèvre y Sestrière no me dicen gran cosa. La 2ª, con final en el Galibier, ya es harina de otro costal: lo que no aporta el Galibier por la cara sur (muy tendido, excelente carretera, pocos porcentajes y normalmente aire a favor), lo hacen con colmo el Agnelo y el Izoard por la Casse Desserte que harán la selección y el Galibier servirá sólo para terminar de “cocer” a los que ya vengan “cocidos”. La tercera etapa alpina es corta, 110 Km, y aunque transcurre por la durísima dupla Telegraphe-Galibier todo se jugará en L’Alpe y ya, con los corredores agotados, no creo en diferencias importantes.
Queda la última etapa en Grenoble contra el crono que será territorio reservado para los especialistas que hayan viajado en “autobús” en las etapas anteriores. No creo que se repita el suspense del año pasado entre Andy y Alberto, con estos u otros protagonistas; para la crono final, aunque la organización no quiera vender lo contrario, siempre resulta que todo el pescado está vendido.
LES JAMBES
Etapas llanas. Aquí la ventaja es para Andy en función de la evidente superioridad de su equipo con personajes como Cancellara que lo llevará en estas etapas en un sillón como ya demostró el año pasado en la etapa del pavés. Alberto: 6; Andy: 9.
LA TÊTE